La Fundación del Patrimonio Histórico de Castilla y León, integrada por las cajas de ahorros de la región y la Junta de Castilla y León, organizó en el verano de 2004 la exposición “Frómista 1066-1904. San Martín: centenario de una restauración”
30.303 visitantes disfrutaron de esta exposición pensada para dar a conocer la historia de la iglesia románica de San Martín de Frómista, uno de los ejemplos más destacados del Románico y estación ineludible en el Camino de Santiago.
Desde su inauguración, el 1 de julio, hasta su clausura, el 3 de octubre, la muestra recibió la visita de 7.545 peregrinos que caminaban hacia Santiago en este año jubilar y han aprovechado su paso por Frómista para conocer a fondo la historia de la construcción y la restauración del templo palentino.
LAS ESTRELLAS DE LA EXPOSICIÓN
Uno de los puntos que mayor interés despertó entre los visitantes fue la maqueta que reflejaba el estado de la iglesia antes de la restauración de Aníbal Álvarez, de la que se cumplía el primer centenario. La maqueta permitió comprobar cómo era la iglesia antes de la tarea restauradora que le devolvió su aspecto original. La espectacularidad y la expresividad de esta reproducción facilitó la comprensión del proceso que sacó el monumento del estado de ruina en la transición del siglo XIX al XX.
También fue muy bien acogido por el público el montaje audiovisual que se podía ver en el interior de la iglesia. La proyección llevaba al espectador a través de cada uno de los elementos constructivos y decorativos que han hecho de San Martín un icono del Románico. Gracias a la inestimable ayuda de un personaje animado que encarnaba al maestro de obras, el visitante podía formar su juicio sobre la intervención que empezó en 1895 y concluyó en 1904.
PIEZAS ORIGINALES
Además la muestra aportaba información sobre la historia de San Martín de Frómista y exponía las piezas originales que se trajeron del Museo de Palencia para esta ocasión: dos capiteles, que representan a personajes que intentan dominar a unos leones y una imagen inspirada en la Orestíada de Esquilo, y un canecillo en el que aparece un asno tocando la lira.
En un pabellón anejo a la fachada sur de San Martín, se instaló la parte gráfica e informativa de la exposición que explicaba la arquitectura del templo, su restauración y, a través de ella, la evolución de los criterios sobre restauración en la Europa de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Era éste un pabellón abierto en el que se exponían imágenes y planos inéditos, gracias a una concienzuda labor de investigación previa en archivos y bibliotecas. Desde este recinto se accedía directamente al interior del templo.
El montaje partía de un planteamiento original y coherente, que huía de la mera exposición de piezas y respetaba el interior de la iglesia, en un Año Santo en que todos los peregrinos que caminaban hacia Santiago entraron en este templo, uno de los más destacados de la ruta jacobea.
La exposición cuenta con un catálogo en el que, junto al resumen de los contenidos, se recogen imágenes históricas y actuales de San Martín de Frómista y una serie de textos sobre la iglesia redactados por expertos en la materia.
Esta actividad ha supuesto una inversión de 317.000 euros, financiada por la Fundación del Patrimonio Histórico de Castilla y León, que ha contado con una colaboración del ayuntamiento de Frómista de 30.000 euros.
Vista sudeste de San Martín de Frómista
Maqueta que refleja el estado anterior a la restauración de Aníbal Álvarez
Un momento de la inauguración por la presidenta de la Fundación, Silvia Clemente
Dos visitantes interesados por la información que se detalla en el pabellón expositivo
Canecillos de San Martín de Frómista